TELENOVELA Y REALIDAD: ESTRENO DE "LIBRES COMO EL VIENTO"

Anoche RCTV estrenó en Venezuela su nueva telenovela Libres como el viento, de Pilar Romero (Mi Prima Ciela, Elizabeth, Maite, Toda Mujer), inspirada en la novela de Rómulo Gallegos "La Brizna de Paja en el Viento".

En la sinopsis de la novela se hace énfasis en que es una historia de amor "marcada por el acontecer y la actualidad universitaria". Ese contexto es una clara referencia a la realidad del movimiento estudiantil venezolano, que justamente desde que el gobierno no le renovó la concesión a RCTV, se ha activado y ha pasado a ser protagonista político de la difícil y polarizada cotidianidad venezolana:

Es muy temprano para evaluar esta telenovela. Por ahora, me llama la atención dicho contexto, cuya representación podemos ver en esta promo:



Y no puedo dejar de notar que actualmente la telenovela venezolana vive un proceso inverso al que yo encontré (y estudié) a mediados del año 2003. En aquel momento, RCTV y Venevisión competían por el primer lugar de la televisión en señal abierta. Ambas televisoras estaban en el mismo bando político: le hacían oposición al gobierno de Hugo Chávez. Sin embargo, sus apuestas en cuanto a telenovelas eran diametralmente opuestas. Venevisión apostó a la representación y editorialización de la realidad política a través de la exitosa telenovela Cosita Rica, de Leonardo Padrón. Por su parte, José Simón Escalona, gerente de dramáticos de RCTV opinaba que en aquel momento los venezolanos no querían ver en sus pantallas más realidad (Acosta-Alzuru, 2007, p. 34). Por lo tanto, RCTV colocó en pantalla a La Invasora, de Iris Dubbs, seguida de Estrambótica Anastasia, original de Martin Hahn.

La situación hoy es totalmente diferente y súmamente delicada. RCTV sólo está por cable, hace énfasis en los remakes y las versiones, y apuesta a una telenovela cuyo contexto tiene sabor a realidad. Venevisión, sin competencia real en la TV abierta, pero consciente y temoroso de la precaria libertad de expresión a la cual están sometidos los medios en Venezuela, coloca su mirada en las ventas en el exterior y le pide a sus escritores telenovelas más "universales", sin color local y sin arriesgarse a presentar contenidos que puedan ser controversiales porque se acerquen a la realidad.

Y, a pesar de que la pregunta pertinente sería "¿qué queremos ver los venezolanos en nuestras telenovelas?", es imposible para mí pensar en eso cuando siento que estamos peor. En todo sentido.

REFERENCIA
Acosta-Alzuru, C. (2007). Venezuela es una Telenovela. Caracas: Alfa.